...a propósito (o despropósito) de 007

CASTING.

Después de mucho negociar dentro y fuera del cuadrilátero, convencí a mi esposo que fuéramos a probarnos para la película gringa. “Es nuestra oportunidad, quizá la única, la última, “la”, de aparecer en el cine. No a todos se les da, pantalla grande, un regalo del cielo que los antofagastinos ni soñamos”. –argumenté. Con el cabro chico fue fácil, vamos sí o sí. Encantado (pobrecito aún no sabe de desilusión, ni de tercer mundistas, ni tiene sentido del ridículo, en fin, angelito). “con esta mamita” dijeron los otros dos hijos grandotes, “ridícula” fue uno de sus envidiosos adjetivos.

Así me di a la tarea –porque si no lo hace una, ¿quién?- y junté los atuendos: gorritos, trencitas, ponchitos, aguayos, morrales, aritos de plata peruana, y hasta una zampoña y una quena.
De bolivianos nos presentamos. Nos atendió un gringo que parecía guagua rusa, con cara de nert y dijo “no poder ser, you very serious, (era que no, si lo traje a empujones, quise explicar) you very crazy, (bendita la locura pensé) y cabro very smiling (ojala le dure) y sin más nos mandó pa` fuera.

Mientras volvíamos a casa con la cola entre los ponchos, -obvio que nadie hablaba-, pensé que pondría el aguayo como mantelito, y que el vestido negro me serviría para la noche de brujas y los gorros los amoldaría pal`18. Nada es perdido. Pero, es terrible andar siempre corto o largo. Recordé cuando nos negaron el crédito fiscal por tener una luka demás. O el subsidio del agua por vivir en un barrio que no. O estaba pasada por unos años para aquel trabajo. Para el programa de los gordos también me faltaban unos gramos y para el club de anónimos copas. Siempre sobrando o faltando.

Quedó la foto. La amplié y enmarqué. Un metro por 80 en pino oregón. Ahora mandaré a tallar en onix un título destacado para poner sobre ella, sólo me falta elegir de estos que se me ocurren:
- “TROFEO DE UN INTENTO”
- “A PASOS DE HOLLYWOOD”
- “A PUERTAS DE LA FAMA”
- “A UN PASO DE PRIMERA”
- “CASI, CASI, ESTRELLAS”
- “SOÑANDO EN TECNICOLOR”
- “LOS BOND LATINOS”.

Todo esto ha sido pa` más peleas y burlas -en casa ya ni me hablan- pero
¡Qué me importa!. Mientras este Bond aquí, respirando mi aire, mirando mi mar, y porque no, compartiendo mi noche, me da todo, todo, lo mismo.