loukamenguante

Monday, February 18, 2008


EL H O M B R E MMMARIPOSA

Sólo las equis que clavó en ciertos ojos
Pueden reproducir sus alas invisibles.

Las radiografías no reflejaron
el interior del hombre mariposa
Que se atrevió a volar un día.

Aleteo tras aleteo
levantó sus cansados botines,
tomo sus muchas pertenencias
y sonriendo, aventuró el vuelo.

Pronto peso y luz dañaron su temple
Porque cierta doncella cerró piernas
Y se lavó las manos.

Atolondrado, invocó a los ángeles,
a Leonardo,
a Icaro
a pájaros
y ovnis.
Nadie respondió
Sabían que su nombre quedaría en lo más profundo
De la amnesia colectiva.

Entonces... él,
irremediablemente
¡cayó!

Cayó hundiendo la sinrazón en su propio nido
Cayó remojando las barbas en su propio plato
Cayó como chillido en medio del lecho mudo.
Cayó... y cayó...
Chorreando:
gotitas de arrojo
gotitas de sueños
gotitas de expiación.

¿Y sus alas?
Sus alas incoloras por el esfuerzo de transigir,
hoy languidecen junto a un puñado de anti-trofeos
que exhiben y recuerdan
el frustrado vuelo.